Donde hubo fuego, visitas quedan

Volvimos a la primera ciudad europea que conocimos en nuestra visita en 2014. Sobran los motivos para justificar por qué regresamos a París.

Jardines de Luxemburgo

Si pispean esta página, dejamos varios artículos sobre qué hacer en una primera visita a la capital francesa. Nosotros esta vez aprovechamos para visitar lugares con los que nos habíamos quedado con ganas aquella vez.

🛎️ En esta oportunidad nos hospedamos en el hotel Louis Blanc. Próximo a la Gare du Nord y a varias estaciones de subte, el hotel cumple.

Visitamos los Jardines de Luxemburgo, de entrada pública. Dependiendo de la época del año y las horas de luz, puede estar abierto desde las 7.30 / 8.30 hasta las 16.30 o 21.30hs y se encuentra en el distrito VI. Una vez allí aprovechamos para contemplar el Palacio y sus fuentes, entre ellas la famosa fuente de los Medici.

Imposible resistirse a la tentación de la pastelería francesa

Luego de un viajecito en subte volvimos a caminar por nuestro barrio favorito de París: Montmartre. Nos encanta perdernos por sus calles, comer alguna delicia de la patisserie francesa, como los famosos eclaires, y fotografiar cada rincón de este lugar.

También fuimos a conocer “La Défense”, el distrito financiero compuesto por un complejo de edificios super modernos que contrastan completamente con la arquitectura tradicional de París. Lo más imponente de esta parte es su Grande Arche.

🛍️ También caminamos por Rue de Rivoli, calle de tres kilómetros de extensión, que corre en forma paralela a la Plaza de la Concorde, los Jardines de las Tullerías y el Museo del Louvre. Es un paseo super recomendado para quienes desean hacer compras.

⛴️ También nos regalamos un paseo que recomendamos 100%. Un crucero por el río Sena viendo el atardecer. Estos barcos salen desde los pies de la Torre Eiffel, teniendo una panorámica inolvidable de la ciudad parisina desde el mismísimo río Sena, con un chocolate caliente entre nuestras manos. Hay varias opciones de barcos, nosotros tomamos el Vedette de Paris.

Por la noche también repetimos experiencia, cenando en el Barrio Latino, con una comida bien francesa: ranas, pato y Crême brûlée.

Una visita express a París sirve tanto para conocer lo que quedó en el tintero o, si fuera tu primera vez, para tener un panorama general de la ciudad.

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