¿Por qué hacer fila para embarcar hoy sí se justifica?

Suenan los altavoces del aeropuerto:

“Llamamos a embarcar a los miembros Elite, Elite Plus, Royal Unique, Diamond Supreme…”

Y luego de una breve pausa:

“Luego embarcará el Grupo 6.”

Cuando escucho estos llamados, hace ya largos minutos que observo una fila interminable formarse frente a la puerta. Gente de pie, mochilas al hombro, carry on firmemente agarrado como si fuera un salvavidas. Y yo, cómodamente sentado, pienso:

No pueden haber tantos Royal Unique y Diamond Plus Ultra Members en este vuelo.

Y no, claro que no los hay. Esos viajeros frecuentes de pedigrí suelen ser pocos, selectos y… justamente no estarían haciendo fila.

Entonces, ¿qué hace toda esta gente esperando parada y formando una cola durante 30 minutos o más, aparentemente sin sentido? Bueno, hoy por hoy, tan sin sentido no es. Por una sencilla razón: las aerolíneas.

El beneficio oculto de hacer fila (aunque no te toque)

En el mundo actual del “te cobro por todo y, si puedo, por más”, embarcar a último momento se ha convertido en un deporte de riesgo. El motivo es simple: es muy probable que no encuentres lugar para guardar tu carry on en ningún portaequipaje.

Y ahí aparece la temida frase del personal de cabina:

“Señor/a, vamos a despachar su equipaje en bodega.”

Ni bien terminan de formular esa frase, se te llena la existencia de inquietudes:

¿Llevo acá algo importante que no quiero perder de vista? Y se abren dos alternativas: resignarse y sacar a las apuradas aquello importante, o patalear —con mayor o menor dignidad— hasta que se lo tengan que pedir a otra persona.

¿Y si no llevás carry on sino solo una mochila? Bueno… malas noticias. Probablemente tampoco encuentre lugar arriba y deba acompañarte en el ya limitado espacio para tus piernas, transformando el viaje en un verdadero calvario de incomodidad.

Por qué hacer fila para embarcar

Hoy, embarcar entre los primeros de tu grupo tiene una ventaja clarísima: asegurar espacio para tu equipaje de mano.

Y sí, esa es una de las razones principales por las cuales los pasajeros hacen cola mucho antes de que les corresponda. Pero no es la única.

¿Todos hacen fila por su equipaje?

No necesariamente. Si bien el equipaje es un detonante, no es la única razón por la cual la fila se arma tan temprano. Hay otros motivos —más humanos, más emocionales— que también empujan a la gente a pararse antes de tiempo.

Después de todo, si el vuelo va a ser largo y te esperan muchas horas encajado en un asiento, estar de pie unos minutos más parece, psicológicamente, una buena inversión.

A eso se suma el clásico efecto contagio. Las personas usamos a otras como referencia para saber qué es lo correcto hacer. Cuando los primeros se levantan y se paran frente a la puerta, sin decir una palabra están guiando al inexperto: esto es lo que hay que hacer. Y así, uno tras otro, la fila crece como si repartieran upgrades gratuitos.

Y, por supuesto, está la ansiedad aérea: el miedo a perder el vuelo, a que cierren la puerta, a quedar varado para siempre, cual Tom Hanks tras desaparecer Krakozhia. La fila, aunque no acelere nada, ofrece una reconfortante sensación de control.

Estas son solo algunas de las razones más habituales. ¿Te reconocés en alguna de ellas o sos de los que esperan sentados, tranquilos, hasta el último momento?

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¿Por qué hacer fila para embarcar? Hoy por hoy, hacer la cola temprano para embarcar sí tiene sentido. No porque sea cómodo, justo o elegante, sino porque es una estrategia de supervivencia moderna.

Si no querés viajar más incómodo de lo que ya se viaja, o si preferís que tu carry on no conozca la bodega contra tu voluntad, pararte antes de tiempo es casi inevitable.

Y si no… siempre podés luchar por tu Elite Ultra Platinum Membership.

¡Sigamos viajando! ✈️