Luego de mucho tiempo, volvemos con pilas recargadas, con muchas ganas de recorrer el mundo.
En Abril del año pasado debimos parar para arreglar algunas cosas en el camper y, a la vez, trabajar en un hotel de campo en la región Toscana de Italia. También logramos hacer otras cositas que, con el tiempo, les iremos contando.
En estos meses en los cuales trabajamos, pudimos mandar al camper al “esteticista”. Las infiltraciones estaban haciendo mucho daño a nuestra casa con ruedas, así que le hicimos cambiar todo el techo y varios retazos de la pared posterior y una parte de una pared lateral.
Al mismo tiempo, redecoramos el baño y la cocina, dejándole un aspecto un poco más moderno y atractivo.
Por último, pintamos todas las paredes exteriores de la célula, dejando atrás los gastados colores, dejándola uniformemente blanca.
Quedan muchas cositas por hacerle, pero la verdad que no vemos la hora de arrancar nuevamente el viaje. Nosotros dos, y Otto. Otto y nosotros dos. Juntos, siempre. En busca de nuevos paisajes, de nuevas ciudades, de nuevos países y culturas.
Los vandeados estamos a punto de arrancar una nueva aventura europea. ¿Nos acompañan?
¡Qué bueno!¡Los seguimos acompañando! 🥰🥰🥰